La Cooperativa de Trabajo Confluencia Ltda., encargada de administrar la histórica Cerámica Neuquén, enfrenta serias dificultades para regularizar una deuda que supera los 259 millones de pesos con la Cooperativa de Agua, Luz y Fuerza (CALF). A pesar de varios intentos por establecer acuerdos de pago y refinanciaciones, los incumplimientos de la empresa terminaron por desencadenar la interrupción del suministro eléctrico a la fábrica.

Desde hace varios años, la relación entre ambas entidades ha estado marcada por reiterados intentos de regularizar la situación. A lo largo de los meses, la deuda fue creciendo debido a los intereses generados por el no cumplimiento de los pagos establecidos. Sin embargo, la paciencia de CALF se agotó tras múltiples incumplimientos y, finalmente, el suministro eléctrico fue cortado.

Acuerdos de pago fallidos

La situación de la deuda se formalizó el 11 de septiembre de 2023, cuando Cerámica Neuquén reconoció una deuda inicial de más de 84 millones de pesos. En un primer acuerdo, ambas partes establecieron un plan de pagos en 35 cuotas mensuales. Sin embargo, este pacto nunca se cumplió a cabalidad, lo que generó un incremento constante en el saldo de la deuda.

A pesar de las buenas intenciones de la cooperativa administradora de la fábrica para cumplir con sus compromisos, los pagos parciales nunca lograron saldar la totalidad de las facturas pendientes. Además, los intereses y cargos adicionales por morosidad continuaron sumándose, lo que agravó la situación económica de Cerámica Neuquén.

La deuda total de la cooperativa alcanzó los 259 millones de pesos a finales de 2024. A este saldo se suman los pagos parciales realizados y las facturas pendientes, que continúan sin saldarse. Ante esta situación, CALF decidió aplicar la cláusula de preaviso acordada en los acuerdos previos, cortando el suministro eléctrico a la fábrica. Esta medida, aunque drástica, se considera necesaria para evitar un perjuicio a los demás asociados de CALF, quienes cumplen regularmente con el pago de sus facturas.

La interrupción del servicio también se da en un contexto de excesos de potencia contratada, lo que agravó aún más la situación financiera de Cerámica Neuquén. Según CALF, en el primer semestre de 2024 se registraron consumos superiores al 20% de la potencia acordada, lo que añade presión a la ya complicada situación de la cooperativa.

La postura de CALF

A lo largo de este largo proceso, CALF ha intentado mantener un diálogo abierto y flexible con Cerámica Neuquén, buscando siempre una solución que permitiera la continuidad del suministro sin perjudicar a los demás asociados. Sin embargo, la falta de seriedad en el cumplimiento de los acuerdos por parte de la cooperativa administradora de la fábrica hizo insostenible la situación.

La cooperativa distribuidora de energía considera que seguir financiando a Cerámica Neuquén bajo estas condiciones resulta injusto para el resto de los asociados, quienes han cumplido con sus compromisos de pago. En este sentido, la equidad en la distribución del servicio eléctrico es un principio fundamental para CALF, que no puede permitir que unos pocos incumplan mientras los demás cumplen con sus obligaciones.

Una situación crítica para la cooperativa

La interrupción del suministro eléctrico podría generar grandes dificultades para Cerámica Neuquén, una de las empresas más emblemáticas de la región. La falta de energía afectaría directamente su capacidad de producción, lo que podría poner en peligro la continuidad de sus operaciones.

A pesar de la gravedad de la situación, la Cooperativa de Trabajo Confluencia Ltda. aún tiene la oportunidad de regularizar la deuda y llegar a un acuerdo con CALF que permita restablecer el servicio. Sin embargo, si los incumplimientos continúan, la deuda podría seguir incrementándose, lo que pondría en riesgo la estabilidad financiera de la cooperativa y su capacidad para operar a largo plazo.

Para evitar que la situación se agrave aún más, expertos en el sector sugieren que Cerámica Neuquén debe revisar su modelo de gestión y encontrar una solución integral para resolver sus problemas económicos. Esto no solo implica regularizar la deuda con CALF, sino también optimizar su consumo energético y cumplir con las normativas vigentes.

La historia de la deuda entre CALF y Cerámica Neuquén refleja un problema más amplio relacionado con la sostenibilidad financiera de las empresas que dependen de servicios públicos esenciales. En un contexto de crisis económica y altos costos operativos, es fundamental que las empresas encuentren un equilibrio entre sus necesidades de producción y su capacidad para cumplir con sus obligaciones.

Neuquén albergará el primer Congreso Provincial de Derechos del Consumidor

artículo anterior

Bermúdez pide mayor transparencia en la facturación de los servicios públicos

Próximo artículo

También te puede gustar

Comentarios

Los comentarios están cerrados.

Más en Neuquén