La Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de la Legislatura Provincial reabrió el debate sobre el uso de teléfonos móviles en las escuelas, tras recibir la opinión de la ministra de Educación, Soledad Martínez. La ministra se pronunció a favor de una regulación, en lugar de una prohibición total, sobre el uso de celulares en el aula, con el objetivo de aprovechar sus potencialidades pedagógicas sin que interfieran en el proceso de aprendizaje.
En su intervención, la ministra Martínez destacó que la estrategia del Ministerio es permitir el uso controlado de los celulares, en lugar de erradicarlos completamente de las aulas. Según su visión, los docentes deben poder establecer pautas claras sobre cuándo y cómo se puede utilizar la tecnología en clase, promoviendo su empleo en actividades vinculadas al aprendizaje. "Queremos formar ciudadanos responsables y críticos en el uso de la tecnología", explicó Martínez en su comunicación a la Comisión.
La funcionaria también subrayó que el bloqueo total de los celulares no resolvería los problemas subyacentes, como el acoso escolar o el grooming, ya que estos fenómenos también ocurren fuera del horario escolar. Además, enfatizó la posibilidad de usar los dispositivos como una herramienta educativa, con la opción de bloquear aplicaciones no relacionadas con el aprendizaje, una medida que podría reducir las distracciones sin eliminar la tecnología por completo.
La diversidad de opiniones entre los legisladores
El debate también reflejó las distintas perspectivas dentro de la Comisión. El diputado César Gass (JxC-UCR), autor de uno de los proyectos que limita el uso de celulares en el nivel secundario, expresó que su propuesta busca "limitar su uso a lo estrictamente necesario para el aprendizaje". Según Gass, los celulares son una fuente constante de distracción, además de representar un riesgo en relación con el aumento de las apuestas online entre los adolescentes.
Por su parte, la diputada Mercedes Tulián (PRO-NCN) puso énfasis en la autoridad de los docentes dentro del aula. Según ella, el problema va más allá del uso de los celulares; lo que realmente está en juego es la capacidad de los docentes para manejar el aula. Tulián sugirió que una ley que regule el uso de dispositivos podría devolver a los maestros el control sobre el entorno educativo.
Desde el bloque de Comunidad, varios legisladores se mostraron en favor de una regulación que permita a los docentes decidir cuándo es adecuado usar los celulares. La diputada Yamila Hermosilla opinó que prohibir los dispositivos en una era marcada por la tecnología sería un paso atrás, sugiriendo que lo que se debe hacer es educar en su uso responsable. Mónica Guanque, también de Comunidad, coincidió en que es necesario darle un marco legal a los docentes para que puedan gestionar esta herramienta en el aula.
Por otro lado, la diputada Gisselle Stillger (Arriba Neuquén) resaltó que la legislación permitiría a los maestros regular el uso de los dispositivos sin sobrecargar su trabajo, al tiempo que se podría concientizar a toda la comunidad educativa sobre los límites del uso de los celulares en horario escolar.
El futuro del uso de la tecnología en las aulas
El debate continúa abierto y se espera que en las próximas sesiones la Comisión convoque a más expertos, como representantes de la Subsecretaría de Tecnologías Educativas, para conocer más sobre las herramientas disponibles para regular el uso de los celulares. Mientras tanto, algunos legisladores siguen defendiendo la necesidad de avanzar hacia una educación que aproveche los recursos tecnológicos sin perder de vista los riesgos que pueden representar.
En definitiva, el tema sigue siendo un desafío complejo que requiere un equilibrio entre la innovación educativa y la protección de los estudiantes frente a posibles distracciones y riesgos asociados con el uso irresponsable de la tecnología. La discusión está lejos de resolverse, pero lo cierto es que el debate sobre los celulares en las aulas ha puesto sobre la mesa una cuestión clave: cómo preparar a las nuevas generaciones para vivir en un mundo cada vez más digital.
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