
Neuquén cerrará el 2025 con una particularidad que no pasará desapercibida para miles de trabajadores del Estado provincial. A través de un decreto oficial, el Gobierno neuquino confirmó los asuetos administrativos de Navidad y Año Nuevo y terminó de configurar un calendario que derivará en dos súper fines de semana largos consecutivos, cada uno de cinco días. La definición, que ya genera impacto en la organización familiar y laboral, establece uno de los esquemas de descanso más amplios del país para el sector público en el cierre del año.
La medida fue formalizada mediante el decreto provincial 1691, que alcanza al personal de la Administración Pública Provincial centralizada y a los entes descentralizados. Según se detalló en los fundamentos oficiales, la decisión busca facilitar los traslados habituales de estas fechas, permitir una mejor planificación de las celebraciones y optimizar el funcionamiento interno del Estado en un período donde la actividad administrativa suele reducirse.
La combinación de asuetos provinciales con feriados nacionales terminará dando lugar a dos bloques de descanso consecutivos que abarcarán buena parte del cierre de diciembre y el inicio de enero.
El primer súper fin de semana largo se extenderá desde el martes 24 hasta el domingo 28 de diciembre de 2025, e incluirá el feriado nacional por Navidad del jueves 25. En ese tramo, los asuetos administrativos permitirán que muchos trabajadores estatales no deban retomar tareas entre medio de las celebraciones y el fin de semana.
El segundo período de descanso extendido irá desde el miércoles 31 de diciembre de 2025 hasta el domingo 4 de enero de 2026, incorporando el feriado de Año Nuevo del jueves 1°. De esta manera, el inicio del nuevo año también estará marcado por varios días consecutivos sin actividad administrativa regular.
Los días de asueto administrativo confirmados son el 24, 26 y 31 de diciembre de 2025, y el 2 de enero de 2026. Sumados a los feriados nacionales, estos días terminan de configurar dos fines de semana largos consecutivos, algo poco habitual en el calendario laboral estatal.
Desde el Ejecutivo provincial aclararon que la medida alcanza exclusivamente al personal de la Administración Pública Provincial y a los entes descentralizados. Sin embargo, como ocurre en cada asueto, los servicios esenciales no quedarán suspendidos. Cada organismo deberá establecer las guardias mínimas necesarias para garantizar la prestación de servicios considerados críticos, especialmente en áreas como salud, seguridad y emergencias.
En los fundamentos del decreto se remarcó que el cierre administrativo ampliado permite un uso más eficiente de los recursos públicos, teniendo en cuenta la baja demanda de trámites y gestiones durante las fiestas. Además, se destacó que este esquema facilita la planificación interna y evita interrupciones fragmentadas en un período donde la actividad suele verse reducida de manera natural.





















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