En un acto celebrado este sábado en Plottier, el frente político que encabeza el gobernador Rolando Figueroa dio un paso clave de cara a las elecciones legislativas de octubre. Bajo el nombre de “La Neuquinidad”, ocho partidos sellaron su compromiso con la firma del acta constitutiva y la conformación de una junta electoral que organizará internas si se presentan listas competidoras.
El espacio se presenta como la continuidad institucional del proyecto que llevó a Figueroa al poder en 2023, y busca consolidarse como una alternativa amplia dentro del escenario político provincial. Aunque sólo ocho fuerzas firmaron el acta, desde el frente aseguran que cuentan con el respaldo de numerosas agrupaciones, entre ellas sectores del Movimiento Popular Neuquino (MPN), actualmente en una situación de conducción difusa, y militantes justicialistas críticos de su propio partido.
Una alianza diversa
Los partidos que rubricaron el acuerdo incluyen a Comunidad, liderado por figuras cercanas al gobernador, como Julieta Corroza; Avanzar, con Lucas Castelli; el PRO, representado por Leticia Esteves y Marcelo Bermúdez; y el partido libertario Arriba Neuquén, con la diputada provincial Giselle Stillger como referente. También integran el frente Nuevo Compromiso Neuquino, el Frente Grande, el Partido Socialista y Unión Popular Federal.
La alianza pone en juego no solo una estrategia electoral, sino una narrativa: la defensa del llamado “modelo neuquino”. Según voceros del frente, este modelo está basado en una administración austera, la reducción del gasto político y la ejecución de obras públicas con fondos provinciales, incluso en un contexto de recortes nacionales. Las tres bancas en el Senado y tres de las cinco en Diputados que estarán en disputa se presentan como una oportunidad para blindar ese proyecto.
Fuerzas políticas en reconfiguración
Un dato que no pasó desapercibido fue la presencia de referentes que, aunque no firmaron formalmente el acta, ya actúan en línea con La Neuquinidad. Tal es el caso de legisladores e intendentes del MPN, partido que atraviesa un período de introspección tras perder el control de la provincia. Lo mismo ocurre con figuras del Partido Justicialista, como la diputada nacional Tanya Bertoldi, que han tomado distancia de la conducción actual.
Esta amplitud ideológica es vista como una fortaleza por algunos, y como un desafío de cohesión por otros. Lo cierto es que el frente ya cuenta con su estructura básica y entra de lleno en la etapa de definiciones: candidaturas, mensajes de campaña y posicionamiento frente a una elección que, aseguran, no será una más.
Comentarios