El gobierno de Neuquén, en una nueva fase del impulso a la explotación de recursos no convencionales, ha otorgado a la empresa YPF cuatro nuevas concesiones hidrocarburíferas. Se trata de las áreas Narambuena, Aguada de la Arena, La Angostura Sur I y La Angostura Sur II, que suman un total de 675,79 km² en plena región de Vaca Muerta. Este proceso de adjudicación, el primero bajo la gestión de Rolando Figueroa, se enmarca dentro de una inversión que supera los 12.900 millones de dólares, destinados principalmente a la perforación de más de 700 pozos horizontales.

Las nuevas concesiones no solo buscan incrementar la producción de gas y petróleo, sino también transformar la infraestructura de la provincia, en especial en las áreas cercanas a la cuenca de Vaca Muerta. De acuerdo con las previsiones, la inversión inicial en las etapas piloto será de 340,3 millones de dólares para perforar 27 pozos. A lo largo de las siguientes fases, se estima que la inversión total en la explotación de estas áreas ascenderá a 214.600 millones de dólares, lo que permitirá perforar más de 14.000 pozos adicionales.

Las concesiones, de manera particular, se distribuyen en diferentes áreas geográficas de Vaca Muerta, con características específicas. La concesión Narambuena, por ejemplo, se encuentra en la ventana de petróleo negro de la formación y se prevé una producción de 246 millones de barriles equivalentes de petróleo (BOE) a lo largo de su ciclo. Para las áreas de Aguada de la Arena y La Angostura Sur, la producción esperada es aún mayor, alcanzando hasta 463 millones de barriles, lo que promete un impacto significativo en la economía provincial.

La importancia de las obras de infraestructura

Más allá de la perforación y la extracción de hidrocarburos, el acuerdo con YPF incluye compromisos de obras fundamentales para la provincia. Una de las iniciativas destacadas es la construcción de un gasoducto de 16 kilómetros que llevará gas natural a la localidad de Añelo, un área clave dentro de Vaca Muerta. Este gasoducto no solo permitirá mejorar el abastecimiento de gas, sino que será crucial para soportar el crecimiento industrial de la región.

Además, la pavimentación de un tramo de 90 kilómetros de la Ruta 7, que conectará con otras rutas provinciales y nacionales, facilitará el acceso y la movilidad dentro de la provincia. Este tipo de infraestructura es vital para asegurar la conectividad entre las áreas de producción y los centros urbanos, contribuyendo al desarrollo socioeconómico de la región.

El rol estratégico de Vaca Muerta en la economía de Neuquén

El gobernador Rolando Figueroa ha señalado que, más allá de la explotación de hidrocarburos, las inversiones en infraestructura son una prioridad para garantizar el desarrollo integral de Neuquén. Durante su discurso de apertura de las sesiones ordinarias de la Legislatura, destacó que el proyecto no solo tiene un enfoque en la extracción de recursos, sino también en el bienestar social, con mejoras en la conectividad y el acceso a servicios básicos para las localidades cercanas a las áreas productivas.

En términos de regalías, se estima que las cuatro nuevas concesiones podrían generar hasta 5.000 millones de dólares a lo largo de su ciclo de vida. Este flujo de recursos será fundamental para el financiamiento de nuevos proyectos y para continuar impulsando el crecimiento económico de Neuquén, una de las provincias más ricas en recursos naturales del país.

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