En medio del conflicto por el corte de suministro eléctrico a Cerámica Neuquén, la diputada Cielubi Obreque, quien representó a la cooperativa CALF en instancias previas de negociación, brindó detalles del proceso que derivó en la desconexión del servicio y responsabilizó a la empresa ceramista por no cumplir con los compromisos asumidos. “Esto no es político ni personal. Es una cuestión tarifaria y de números concretos que no pueden seguir siendo ignorados”, expresó en una entrevista.

Obreque recordó que en 2023 participó de una mesa de diálogo en la que se intentó resolver una deuda que en ese momento ascendía a 96 millones de pesos por consumo de energía no abonado. La cooperativa, bajo la presidencia de Marcelo Severini, permitió un acuerdo con facilidades: un plan de pagos y la entrega del 70% del monto impago en ese entonces. Sin embargo, según relató, en pocos meses la empresa comenzó a incumplir nuevamente.

En ese contexto, la Provincia intervino realizando una compra de cerámicos por 180 millones de pesos para colaborar con la situación. Con esos fondos, la cerámica abonó parte de la deuda, pero aún así no logró sostener los compromisos asumidos. "Se veía venir que no iban a poder cumplir, y lo advertimos", afirmó Obreque.

A marzo de 2025, la deuda trepó a 263 millones de pesos, cifra que, según la abogada, continúa aumentando. "Ellos piden una nueva mesa de negociación y que se restablezca el suministro, pero lo cierto es que el acuerdo que firmamos establece claramente que cualquier incumplimiento habilita el corte. No es una decisión arbitraria", explicó.

La exrepresentante de CALF también desmintió que la cooperativa se haya negado a recibir garantías. Aseguró que en la primera mesa de negociación, los ceramistas llegaron con camiones cargados de productos como forma de respaldo. “Eso salió en medios, fue público. No se puede negar ahora”, sentenció.

En cuanto al reclamo de los trabajadores de Cerámica Neuquén, que argumentan que su condición de empresa sin patrones y su rol social ameritan un tratamiento especial, Obreque fue clara: “Sí, coincidimos en que hay una problemática tarifaria, pero eso es responsabilidad del Estado nacional, que dejó de subsidiar a los sectores electrointensivos. No puede caer esa carga sobre una cooperativa que tiene que cuidar sus finanzas”.

También fue crítica con las manifestaciones que implican cortes de ruta. “Entiendo el reclamo, pero esas medidas perjudican a otros trabajadores, a los chicos que van a la escuela, al transporte público. No ayudan a resolver el conflicto”, señaló.

Por último, Obreque sostuvo que la solución está del lado de la cerámica: “Tienen stock valuado en 140 millones. Les dijimos que lo pongan en garantía ante una entidad financiera y con eso retomen el pago. Si hay una propuesta concreta, se puede volver a hablar. Pero si la respuesta es la misma que ya fue rechazada, no hay manera de avanzar”.

Con la tensión en aumento y las movilizaciones en curso, el conflicto entre la histórica cerámica neuquina y la cooperativa CALF parece estar lejos de resolverse. Según Obreque, la única salida es que la empresa se ordene internamente y regularice su situación. “CALF ya hizo todo lo que podía hacer. No se puede desordenar lo que costó tanto ordenar”.

"Fue un éxito rotundo": la CGT celebró el impacto del paro general y advirtió por nuevas medidas

artículo anterior

Adorni recargado: comparó al PRO con un Nokia 1100 y dijo que "quedó obsoleto"

Próximo artículo

También te puede gustar

Comentarios

Los comentarios están cerrados.

Más en Neuquén