En una ciudad como Neuquén, donde el desarrollo inmobiliario avanza a ritmo acelerado, la capacidad de respuesta ante emergencias no ha crecido en la misma proporción. Frente a esta realidad, la concejal Valeria Todero presentó un proyecto de ordenanza que apunta a mejorar el equipamiento del Cuerpo de Bomberos, incorporando una autobomba con escalera de gran altura, diseñada para operar en edificios de más de diez pisos.

La iniciativa no sólo responde a estándares internacionales y normativas técnicas locales, sino que también intenta cerrar una brecha evidente entre el crecimiento vertical de la ciudad y los recursos operativos disponibles para enfrentar incendios o rescates complejos en alturas.

Una necesidad largamente postergada

El proyecto plantea que el Ejecutivo municipal debe tomar cartas en el asunto, avanzando con los trámites necesarios para la adquisición del vehículo. No se trata sólo de una compra: la propuesta incluye la posibilidad de gestionar fondos ante organismos provinciales, nacionales o internacionales, y contempla también la opción de firmar acuerdos con instituciones públicas y privadas.

Desde el entorno de la concejal Todero destacan que actualmente Neuquén carece de una unidad de estas características, lo que deja desprotegida a una parte cada vez más significativa de la población. El parque edilicio con construcciones superiores a diez pisos crece cada año, pero la infraestructura para atender emergencias en ese tipo de escenarios no ha seguido el mismo ritmo.

Plan integral y financiamiento mixto

El proyecto no se limita a la compra del vehículo. Exige al Ejecutivo la elaboración de un plan de acción que incluya un cronograma detallado, un esquema de financiamiento, una estrategia de mantenimiento a largo plazo y capacitaciones específicas para el personal operativo.

Una de las propuestas más destacadas es la posibilidad de avanzar en un modelo de Alianza Público-Privada (APP). El objetivo es que los desarrolladores inmobiliarios que construyan edificios de más de cuatro pisos realicen aportes obligatorios —ya sea económicos, en especie o mediante compensaciones urbanísticas— para contribuir con el fortalecimiento del equipamiento de Bomberos.

También se prevé la creación de un fondo municipal específico para seguridad en altura, que podría financiar tanto la compra del vehículo como futuras inversiones en tecnología y capacitación.

Una deuda con la seguridad urbana

La propuesta se presenta como una medida urgente frente a un contexto urbano cambiante. El crecimiento de edificios en altura exige soluciones operativas que hoy la ciudad no tiene. Si bien el proyecto aún debe ser debatido en el Concejo Deliberante, la falta de equipamiento adecuado en emergencias verticales es una preocupación creciente entre los profesionales de seguridad y vecinos.

Pintura sobre el asfalto: Neuquén lanza operativo para mejorar la señalización vial

artículo anterior

Volvió Gabinete en el Barrio: esta vez fue el turno de la zona sur de la capital neuquina

Próximo artículo

También te puede gustar

Comentarios

Los comentarios están cerrados.

Más en Neuquén