En la provincia de Buenos Aires, la Legislatura convirtió en ley una iniciativa que busca hacerle la vida un poco menos complicada a las madres que crían solas a sus hijos. Se trata de un proyecto que agiliza y simplifica los procesos judiciales para reclamar la cuota alimentaria. Porque, spoiler alert, la Justicia a veces tarda demasiado y los chicos no pueden esperar.

La nueva ley llega para saldar una deuda histórica: 7 de cada 10 mujeres que crían en soledad no reciben la cuota alimentaria o la perciben de forma esporádica. Este dato no es un invento, sino parte de un informe del Ministerio de Mujeres y Diversidad de la provincia. Sí, 7 de cada 10. No importa si sos de clase baja, media o alta: el incumplimiento no discrimina.

¿Qué cambia con esta ley?

La nueva norma apunta a sacudir la burocracia judicial con varias modificaciones clave:

  • El monto de la cuota ya no se discute en el aire: Se tomará en cuenta el Índice de Crianza elaborado por el INDEC. Esto es, básicamente, ponerle números reales a los gastos de criar a un hije.
  • Chau a las demoras eternas: Ahora habrá plazos concretos. Las entidades privadas tienen 5 días para responder los pedidos de informes (por ejemplo, bancos) y las públicas 7 días.
  • Whatsapp para notificar demandas: ¿El deudor no atiende la puerta? No importa, se lo notifica por mensajito. Sí, por WhatsApp. Si te aparece un “visto” y no responde, se sigue adelante. No hay excusas.
  • Se acabó la joda de no presentarse a la audiencia: ¿No fue a la audiencia sin justificación? Multa e intereses. Ya no vale la vieja estrategia de "desaparecerse" para que todo se dilate.

La ministra Estela Díaz no se guardó nada

La ministra de Mujeres y Diversidad, Estela Díaz, salió a bancar fuerte esta nueva herramienta. "Se busca equiparar las condiciones de desigualdad y desequilibrio de poder en los procesos judiciales por incumplimiento de la cuota alimentaria", dijo, sin vueltas.

El trasfondo de esta ley es una realidad que golpea fuerte: muchas mujeres se ven forzadas a endeudarse para cubrir los gastos de sus hijes, mientras esperan que el padre pague la cuota. La ley busca revertir esta lógica de poder desigual, que pone a las mujeres en un laberinto judicial sin salida.

El dato que indigna

El informe que impulsó esta ley reveló algo difícil de digerir: el 65% de las mujeres bonaerenses no recibe la obligación alimentaria de parte del padre de sus hijes o la perciben de forma esporádica.

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