En un movimiento que marca un antes y un después en la política neuquina, el Movimiento Popular Neuquino (MPN) anunció oficialmente que no participará en las elecciones legislativas nacionales de octubre de 2025. La determinación fue comunicada por la Junta de Gobierno del partido tras una reunión interna, y se enmarca como un “gesto de responsabilidad y madurez institucional”.
Se trata de una decisión inédita para un espacio que dominó la escena política de la provincia durante más de seis décadas. Desde su derrota en las elecciones a gobernador de 2023, el MPN transita un proceso de reacomodamiento interno y replanteo de estrategia. La falta de estructura territorial, sumada a la fragmentación de su base dirigencial, terminaron inclinando la balanza hacia la no participación.
El comunicado difundido por el partido lleva la firma del exgobernador y actual presidente del MPN, Omar Gutiérrez, junto a otros referentes. El texto, de cuatro páginas, repasa la historia del partido desde su fundación en 1961 y admite que los resultados recientes —como el magro 6,1% obtenido en las legislativas de 2021— obligaron a repensar el presente y el futuro inmediato.
Según explicaron, barajaron tres caminos: presentarse con lista propia, formar una alianza con otros espacios, o no competir. Finalmente, optaron por la tercera vía. “No participar hoy evita un retroceso mayor mañana”, sostiene el documento, que también descarta la posibilidad de alianzas con otras fuerzas como La Neuquinidad.
Lejos de considerarlo una retirada definitiva, desde el MPN insisten en que es una pausa necesaria. “Cuidar el partido es saber cuándo avanzar”, afirma el texto, que plantea una idea clara: evitar una exposición innecesaria en un escenario electoral adverso.
Apoyos individuales y el rol de Figueroa
Pese a que el MPN no tendrá boleta propia en octubre, varios de sus dirigentes ya manifestaron públicamente su respaldo a candidatos afines al actual gobernador Rolando Figueroa. Intendentes y presidentes de comisiones de fomento firmaron un acta en la que se comprometen a acompañar esas listas, en un guiño que deja entrever nuevas configuraciones políticas en la provincia.
“La decisión es un gesto que prioriza los intereses de Neuquén”, remarcan, al tiempo que aseguran que el MPN “no se oculta, se reorganiza”. La apuesta, en definitiva, parece estar puesta en el mediano plazo.
La mirada de Sapag: presencia más allá de los votos
En paralelo, Jorge Sapag, presidente de la Convención del partido y dos veces gobernador, tomó distancia del debate electoral, pero dejó una reflexión: “El MPN tiene una presencia que va más allá de los cargos. Está en las obras, en las escuelas, en los hospitales. Con sus aciertos y errores, ha dejado una marca profunda en la provincia”.
Sin definiciones sobre el futuro, el MPN se toma un respiro en un contexto de cambio. Y aunque no jugará este partido, ya empieza a planificar el próximo.
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