San Martín de los Andes, uno de los destinos más emblemáticos de la Patagonia argentina, concluyó la temporada de verano con un balance favorable, destacándose como un lugar ideal para quienes buscan desconectar en un entorno natural. Sin embargo, la temporada estuvo marcada por variaciones en los niveles de ocupación hotelera, con un repunte significativo en enero y una caída en febrero.
Según los últimos datos proporcionados por la Secretaría de Turismo local, la ocupación hotelera promedio en los dos primeros meses del año fue del 65%. En total, la ciudad recibió a 41.538 turistas, quienes se quedaron un total de 228.459 noches en los alojamientos habilitados.
Enero: el mes más fuerte de la temporada
Durante enero, San Martín de los Andes vivió un fuerte incremento en la demanda turística, alcanzando una ocupación hotelera del 72%. Este mes fue clave para el destino, que se benefició de la alta demanda de turistas nacionales, especialmente familias que aprovecharon las vacaciones de verano. La ciudad estuvo casi al máximo de su capacidad, lo que reflejó la popularidad de la zona para quienes buscan disfrutar de sus paisajes y actividades al aire libre.
Febrero: la baja por el inicio de clases
Sin embargo, el mes de febrero mostró una disminución considerable en la ocupación, cayendo al 55,7%. Esta baja es atribuida al inicio de clases en diversas provincias del país, lo que afectó la cantidad de turistas que decidieron prolongar su estadía. A pesar de la caída, el número de turistas que eligieron San Martín de los Andes en febrero sigue siendo significativo, lo que demuestra que, a pesar de los altibajos, la ciudad se mantiene como una opción atractiva para quienes buscan escapar de la rutina.
Un perfil de turista diverso
Aunque las reservas anticipadas estuvieron presentes, lo más común fue que los turistas llegaran a la ciudad sin reserva previa, buscando una buena relación entre precio y calidad en los servicios ofrecidos. Este comportamiento se refleja en una tendencia creciente de reservas espontáneas, donde el turista opta por decidir sobre la marcha en función de lo que encuentre a su llegada.
El perfil del visitante fue variado, aunque predominó la llegada de familias, seguidas por parejas y grupos de amigos que llegaron en busca de tranquilidad y naturaleza. En cuanto a la duración de la estadía, la mayoría de los turistas permaneció en San Martín de los Andes alrededor de cuatro noches, lo que sugiere un interés en vivir experiencias más completas y conectadas con el entorno.
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