Los bloques opositores en el Senado avanzan en una maniobra para frenar los nombramientos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla como jueces de la Corte Suprema, designados por el presidente Javier Milei vía decreto.
Con el apoyo de legisladores de la Unión Cívica Radical (UCR) y del formoseño Francisco Paoltroni, fuerte crítico de Lijo, buscan convocar a una sesión especial para rechazar las designaciones y marcarle la cancha al oficialismo.
El Senado busca bloquear las designaciones de Lijo y García Mansilla
Para que los pliegos lleguen al recinto, la Comisión de Acuerdos necesita al menos nueve firmas. Actualmente, la oposición ya juntó ocho, con las firmas de senadores del peronismo y parte del radicalismo.
El problema para el gobierno libertario es que, en paralelo, La Libertad Avanza ni siquiera consiguió dictamen a favor de García-Mansilla. Aunque aseguran que tienen cuatro firmas de apoyo, en la UCR lo niegan: "Dicen que hay un dictamen con firmas, pero nadie lo vio", afirman fuentes del bloque.
En las últimas horas, la presión se concentró en tres senadores radicales que podrían inclinar la balanza: Mariana Juri, Maximiliano Abad y Carolina Losada. Los dos últimos ya expresaron su rechazo a los candidatos elegidos por Milei, pero no definieron si firmarán el dictamen que destrabe la votación en el recinto.
Si la oposición logra sumar una firma más, la vicepresidenta Victoria Villarruel estará obligada a tratar el tema en sesión, lo que podría derivar en un golpe político para el gobierno, que hasta ahora no consiguió apoyo suficiente ni siquiera dentro de sus aliados.
El giro de la UCR y las internas en el oficialismo
El jueves pasado, el bloque radical acordó en una reunión interna rechazar los pliegos de Lijo y García-Mansilla, pero al día siguiente el senador Eduardo Vischi –alineado con el gobierno– presionó para frenar el dictamen y evitar que el Senado avance contra los jueces elegidos por Milei.
Desde la UCR aseguran que no hay chances de que Lijo y García-Mansilla obtengan los dos tercios necesarios para ser confirmados, por lo que el oficialismo apuesta a dilatar la discusión para evitar el rechazo explícito de los pliegos.
Mientras tanto, la Corte Suprema ya tomó juramento a García-Mansilla –basándose en el decreto presidencial– y rechazó el pedido de licencia de Lijo, lo que significa que el juez deberá renunciar a su cargo en Comodoro Py si quiere sumarse al Máximo Tribunal.
¿Qué pasa si el Senado rechaza los pliegos?
Si los senadores opositores logran los votos necesarios, los nombramientos de Milei quedarían en suspenso y el presidente estaría obligado a enviar nuevos nombres o insistir con los mismos en otro intento. Para aprobarlos, necesita dos tercios de los senadores presentes, un escenario que hoy parece imposible.
Con la oposición cada vez más alineada contra la jugada del Ejecutivo, la crisis política en torno a la Corte sigue escalando y Milei enfrenta su primer gran desafío en el Senado. Si la oposición logra bloquear los nombramientos, será un duro revés para el gobierno y una muestra de que la Casa Rosada todavía no tiene el control del Congreso.
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