Elisa "Lilita" Carrió volvió al ruedo electoral con declaraciones de alto voltaje. En una entrevista televisiva, la líder de la Coalición Cívica anunció que será candidata a diputada por la Provincia de Buenos Aires, y de paso, aprovechó para disparar munición gruesa contra el presidente Javier Milei y su hermana Karina, a quienes definió directamente como "marginales".
La creadora de la Coalición Cívica no esquivó el escándalo Libra y aseguró que lo que está detrás de la polémica criptomoneda es directamente "una estafa piramidal", donde los principales beneficiados son los propios Milei.
“Todo el mundo sabía que Milei y su hermana son marginales. Así como dije en 2013 que el cajero era De Vido, acá la cajera es Karina”, sentenció.
Una marca registrada... ¿y una caja paralela?
Carrió reveló además un dato que hasta ahora había pasado desapercibido: Karina Milei habría registrado la marca "Milei" en Argentina, algo que, según la dirigente, estaría directamente relacionado con el flujo de fondos detrás del caso Libra. “Es tan grosero todo, que la gente hoy no lo quiere ver. Lo van a ver cuando venga la crisis”, anticipó.
Consultada sobre si impulsará un juicio político contra el presidente, Carrió descartó esa opción por ahora. “No lo hice con Kirchner y tampoco lo voy a hacer con Milei. Los actos de corrupción ya se cometieron, pero esto no va a salir ahora, va a salir después”, explicó, convencida de que la verdadera bomba explotará cuando la investigación llegue a tribunales internacionales.
En esa misma línea, disparó contra la jueza María Servini, a quien acusó de "no moverse porque hay que estar con el sistema", y deslizó que la causa terminará avanzando por fuera del país.
Lijo y García-Mansilla: otra jugada "inconstitucional"
Carrió también apuntó contra los nombramientos por decreto de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla en la Corte Suprema. Según Lilita, la designación es claramente inconstitucional, un tema que promete escalar en la discusión pública.
Con el FMI, sí; pero sin planchar el dólar
A pesar de las críticas, Carrió dejó en claro que respaldará el acuerdo del Gobierno con el FMI, tal como lo hizo con el firmado por Alberto Fernández. Eso sí, puso una condición: que el dinero no se use para planchar artificialmente el dólar.
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