Los principales resultados de la autopsia realizada por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) apuntan a una muerte violenta, aunque no se pudo determinar si fue un suicido, accidente o asesinato.
Los detalles del análisis forense realizado en los restos de Facundo Astudillo Castro, encontrados el 15 de agosto en la zona de Villarino Viejo, informaron la presencia de algas microscópicas en la médula ósea. Las mismas coinciden con las de las muestras ambientales tomadas en el lugar del hallazgo.
El informe del EAAF indicó que la muerte del joven se produjo por asfixia por sumersión (ahogamiento). Este tipo de muerte es causada por la obstrucción de la vía aérea por el ingreso de líquidos durante el proceso de respiración bajo el agua, motivo que genera el ahogamiento.
La presentación indica que se trató de una "muerte violenta", por no ser natural. El avanzado estado de esqueletización del cadáver impidió conocer el modo de la muerte. No se pudo determinar con rigor científico si se trató de un suicidio, un homicidio o un accidente.
"Los restos óseos estudiados no presentaban lesiones vitales, de origen traumático, ni otras previas a la muerte", señalaron los profesionales. Tampoco se observaron "cambios de coloración en los huesos bajo estudio compatibles con el uso de sustancias ácidas, alcalinas o por exposición a una fuente emisora de calor", detallaron.
En las diferentes piezas óseas observadas, y mediante el estudio de imágenes radiográficas, "no se evidenciaron estructuras de densidad metálica", similares a elementos que puedan corresponderse a proyectiles de arma de fuego o segmentos de arma blanca.
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Publicado por Cris Castro en Jueves, 1 de octubre de 2020
Todas las lesiones y pérdida de algunas piezas dentales son posteriores a la muerte, producto de depredadores y exposición medioambiental. También se observó que no había signos de participación de terceras personas sobre los restos estudiados.
La ausencia de algunas partes del cuerpo "es el esperado para la acción del zorro pampeano", indicaron en el estudio.
La desarticulación y desplazamiento de ambos miembros superiores y del miembro inferior derecho fue producida por este mismo animal, sumado a la fluctuación de agua por las mareas, la presencia de invertebrados (cangrejos) y aves, entre otros.
El tiempo mínimo transcurrido entre la muerte y el hallazgo, sería no menor a 30 días. Del estudio forense no surgen elementos que permitan suponer que los restos humanos hayan estado en otro ambiente distinto al del hallazgo.
La perito de parte de la familia Castro, Virginia Creimer, firmó el informe en disidencia. A las 18 Cristina junto a sus abogados Luciano Peretto y Leandro Aparicio darán una conferencia de prensa desde la sede de Amnistía Internacional.
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