La discusión por la reforma laboral volvió a tensarse en Casa Rosada. Después de una nueva reunión del Consejo de Mayo, el representante de la CGT en ese espacio, Gerardo Martínez (UOCRA), dejó en claro que no acompaña los lineamientos que el Gobierno de Javier Milei prepara para enviar al Congreso el próximo 9 de diciembre.

No estamos de acuerdo con los conceptos vertidos en este Consejo, que es consultivo y no vinculante”, dijo el sindicalista al retirarse de la reunión, dejando en evidencia que el oficialismo avanzará sin consenso sindical.

Reforma laboral sin acuerdo: negociaciones paralelas y letra chica en suspenso

El Gobierno anunció que el borrador con la “modernización laboral” comenzará a circular en los próximos días. Aunque todavía no trascendió la letra fina, desde Balcarce 50 aseguran que el proyecto incorporará algunas de las observaciones planteadas por los actores del Consejo.

Sin embargo, Martínez advirtió que la CGT rechazará cualquier punto que implique un retroceso en los derechos laborales.

Los ejes que podrían integrar el proyecto —según trascendidos oficiales— incluyen:

  • Ultraactividad de los convenios

  • Relación y alcance de los acuerdos colectivos

  • Cargas fiscales

  • Peajes y financiamiento sindical

  • Derechos colectivos y trabajo individual

  • Cambios para autónomos

  • “Democracia sindical”

Para Martínez, varios de esos ítems son inaceptables. “No estamos de acuerdo en todos los puntos”, insistió. Y agregó una frase que sintetiza la postura de la central obrera:
“Somos el último refugio de la nacionalidad”.

Rosca paralela: Martínez y Santiago Caputo, cara a cara

Tras retirarse del Consejo, el titular de la UOCRA se trasladó a la oficina del asesor presidencial Santiago Caputo, donde siguió la negociación a puertas cerradas. No es un dato menor: Caputo es el encargado de trazar la estrategia política del oficialismo y uno de los que impulsa la reforma laboral desde el primer día.

En privado, según fuentes oficiales, Martínez mostró reparos firmes pero también dejó abierta la posibilidad de seguir conversando sobre temas puntuales.

Un Consejo que escucha, pero no decide

Martínez recordó que el Consejo de Mayo —espacio que el Gobierno usa para coordinar temas del “Pacto de Mayo”— solo cumple un rol consultivo. En cada encuentro, empresarios, sindicalistas, legisladores y gobernadores expresan sus posiciones, pero sin obligación de acordar.

De hecho, las diferencias son la norma:

  • La UIA reclama reformas que faciliten la contratación.

  • La CGT pone el freno y exige no tocar derechos adquiridos.

  • Gobernadores y legisladores buscan un punto medio, pero no hay alineamiento común.

Así y todo, Milei mantiene su hoja de ruta: enviar el proyecto el 9 de diciembre y debatirlo en sesiones extraordinarias.

Quiénes estuvieron en la reunión

Alrededor de la mesa en Casa Rosada participaron:

  • Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación (Ejecución del proyecto)

  • Alfredo Cornejo, gobernador de Mendoza (representando a las provincias)

  • Carolina Losada, senadora (Cámara Alta)

  • Cristian Ritondo, diputado (Cámara Baja)

  • Gerardo Martínez, UOCRA – CGT (sindicatos)

  • Martín Rappallini, titular de la UIA (empresarios)

Con posiciones tan distantes, el Gobierno se prepara para enviar una reforma laboral que no llega con aval general, sino como una apuesta política propia que intentará sostener con acuerdos puntuales en el Congreso.

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