El Frente de Izquierda volvió a abrir un frente de discusión en la Legislatura neuquina. Esta vez, el planteo llegó de la mano de Julieta Ocampo, diputada de Izquierda Socialista, quien presentó un proyecto para que los sueldos de los legisladores provinciales se ajusten al valor de una canasta básica total.
Actualmente, según explicó, un diputado percibe alrededor de siete millones de pesos, mientras que la canasta básica se calcula en 1,8 millones. La brecha, sostiene Ocampo, es un símbolo de privilegio que debe eliminarse. “La política no puede seguir cobrando sueldos desproporcionados en medio de una crisis que afecta a todos los trabajadores”, dijo.

El proyecto establece que las dietas legislativas se fijen en relación con la canasta básica y que el excedente se destine al sistema de salud pública. El cálculo difundido por la legisladora indica que el ahorro mensual superaría los 165 millones de pesos.
“Ese dinero debe ir a los hospitales, que atraviesan una situación crítica. Faltan insumos, hay carencias de infraestructura y el personal trabaja en condiciones muy difíciles. Esto no es un gesto simbólico: es una necesidad urgente”, subrayó.
La propuesta también interpela a los demás bloques de la Legislatura. “Escuchamos muchas veces discursos sobre la necesidad de igualarse con la población. Este es el momento de demostrarlo con hechos”, planteó Ocampo.
Salud y política en el centro del debate
La discusión no sólo se centra en las cifras, sino en el rol que debería tener la política en un contexto de crisis económica. Desde el Frente de Izquierda remarcan que su planteo apunta a terminar con “dietas exorbitantes” y a devolver recursos a áreas sensibles de la provincia.
El proyecto será analizado en comisiones y necesita apoyo de otras bancadas para llegar al recinto. Mientras tanto, la iniciativa ya generó repercusión en la sociedad y reaviva un tema recurrente: los ingresos de la dirigencia frente a la realidad cotidiana de los trabajadores neuquinos.
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