Axel Kicillof vuelve a cruzar el charco para participar en la asunción de Yamandú Orsi como presidente de Uruguay. El gobernador bonaerense sumó a su agenda un foro internacional que junta a lo más granado de la política progresista de América Latina.
Panel de alto voltaje
El viernes, Kicillof aterriza en Montevideo para participar del panel “Democracia, desarrollo e igualdad en un mundo en transformación”, organizado por el Frente Amplio, el espacio al que pertenece Orsi.
Ahí compartirá mesa con nombres pesados como el presidente de Chile, Gabriel Boric; la vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez; la número dos de España, Yolanda Díaz; y la presidenta del PT de Brasil, Gleisi Hoffmann. También se suman la candidata a presidenta de Ecuador, Luisa González, y el jefe del Frente Amplio, Fernando Pereira.
La movida se hará en el Salón Azul de la Intendencia de Montevideo, que comanda Mauricio Zunino, uno de los aliados internacionales que Kicillof cosechó en los últimos años.
Una relación que viene aceitada
Kicillof y Orsi ya vienen coqueteando desde hace tiempo. Apenas ganó las elecciones, el gobernador bonaerense lo felicitó en redes y prometió "profundizar los lazos históricos" entre la provincia de Buenos Aires y Uruguay.
De hecho, en 2024 Kicillof cruzó a Montevideo dos veces. En esas visitas se reunió con Orsi, con Zunino y hasta tuvo su foto con Pepe Mujica, que siempre suma puntos en el álbum peronista. La relación se terminó de sellar en octubre, cuando Julio Alak firmó un convenio de “hermanamiento” entre La Plata y Montevideo.
Críticas a Milei y mensaje regional
En cada viaje internacional, Kicillof aprovecha para pegarle al gobierno de Javier Milei, y esta vez no va a ser la excepción. En el último foro que encabezó en Montevideo, el gobernador denunció que la gestión libertaria “abandonó sus responsabilidades vinculadas al desarrollo y niega la desigualdad”.
Esa misma línea es la que va a llevar a Uruguay, donde va a insistir con la idea de que “la integración regional” es clave para enfrentar las crisis. En paralelo, la movida le sirve a Kicillof para mostrarse como un referente con proyección internacional dentro de un peronismo que sigue sin brújula.
Orsi, Kicillof y el progresismo que se junta
Con la asunción de Orsi, el Frente Amplio vuelve al poder en Uruguay y Kicillof quiere capitalizar ese regreso como parte de un armado regional que mira con desconfianza al gobierno de Milei.
Entre paneles, asunciones y cumbres, Axel se prueba el traje de "referente progresista sudamericano", mientras en Argentina el peronismo sigue debatiendo quién va a ser su próximo conductor.
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