El Gobierno de Neuquén salió este jueves a desmentir las versiones que hablaban de una deuda con los bomberos voluntarios que participaron en el combate del incendio de Valle Magdalena, uno de los más extensos de la temporada. La secretaria de Emergencias y Gestión de Riesgos, Luciana Ortiz Luna, afirmó que no existe incumplimiento alguno y explicó que la confusión surgió en torno al financiamiento de los traslados.
“No es una deuda. Una deuda se genera cuando hay un acuerdo previo, y en este caso no lo hubo”, sostuvo Ortiz Luna. Al mismo tiempo, confirmó que la Provincia se hará cargo del gasto de combustible de las dotaciones que viajaron para enfrentar las llamas, como un reconocimiento al esfuerzo desplegado en terreno.

El operativo contra el fuego demandó la presencia de brigadistas y bomberos de distintos puntos de la provincia, que trabajaron durante semanas para contener un incendio que arrasó miles de hectáreas y puso en alerta a varias comunidades. La labor de los voluntarios fue clave para evitar que las llamas avanzaran hacia zonas pobladas, en un contexto de condiciones climáticas adversas y con recursos logísticos exigidos al máximo.
Ortiz Luna subrayó que tanto el Estado provincial como el nacional destinan fondos de manera regular para sostener el sistema de bomberos voluntarios. “Hay leyes nacionales y provinciales que aportan muchísimo dinero para que estas dotaciones puedan movilizarse. Pero no es que haya una deuda, eso es importante aclararlo porque se instaló una confusión en la opinión pública”, explicó.
Desde el Ejecutivo provincial se precisó que, a medida que las federaciones presenten la documentación correspondiente, se transferirán los montos para cubrir los traslados. Además, recordaron que los cuarteles de toda la provincia ya reciben recursos fijos: en la actualidad, se giran unos 730 millones de pesos por trimestre para garantizar su funcionamiento.
El Gobierno provincial busca de esta manera despejar dudas y llevar tranquilidad a las instituciones de bomberos, que cumplen un rol estratégico en la prevención y el combate de emergencias. La aclaración llega en un momento sensible, luego de que trascendieran reclamos sobre supuestos pagos pendientes que generaron malestar en algunas federaciones.
La cobertura del combustible representa un gesto simbólico, pero también una ayuda concreta para los cuerpos que deben afrontar traslados largos en contextos de emergencia. En cada incendio de magnitud, los costos logísticos suelen ser elevados: movilidad de equipos, insumos, alimentación y descanso de brigadistas. Por eso, la decisión del Ejecutivo provincial apunta a reforzar el acompañamiento sin que se interprete como el reconocimiento de una deuda inexistente.
La discusión pública sobre el financiamiento de los bomberos voluntarios pone en primer plano la importancia del sistema de emergencias en Neuquén, un territorio con alta vulnerabilidad ante incendios forestales debido a su geografía y a la variabilidad climática. La Provincia recordó que los aportes regulares están asegurados y que las federaciones cuentan con el respaldo económico necesario para sostener sus operaciones.
En ese marco, el mensaje oficial busca recalcar que no hay incumplimientos, sino un esquema de colaboración permanente que ahora se amplía con el compromiso de solventar parte de los gastos de traslado. “Lo que hacemos es reconocer la tarea de los bomberos y acompañarlos, porque su trabajo es fundamental”, resumió Ortiz Luna.
El incendio de Valle Magdalena, que se extendió por miles de hectáreas, marcó uno de los desafíos más grandes del año para las brigadas neuquinas y dejó en evidencia la necesidad de fortalecer la coordinación entre los distintos niveles del Estado y las instituciones voluntarias. Con este anuncio, la Provincia intenta cerrar la polémica y reafirmar el rol central de los bomberos voluntarios en la protección de las comunidades.
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