Lo que iba a ser una sesión clave en el Senado de la provincia de Buenos Aires terminó en escándalo y suspensión. La discusión sobre un proyecto que habilita la reelección indefinida para concejales, legisladores y consejeros escolares desató una nueva guerra interna en Unión por la Patria (UP) y dejó al oficialismo sin quórum.
Todo empezó cuando la vicegobernadora Verónica Magario convocó a sesión para tratar el proyecto impulsado por el senador kirchnerista Luis Vivona sobre las reelecciones indefinidas. Pero a las pocas horas, desde el kicillofismo presentaron otro texto similar... con un detalle: incluía a los intendentes.
Esa jugada rompió lo poco que quedaba de unidad. Ayer, la sesión voló por los aires y este jueves no habrá nada en el recinto. La interna estalló: cinco senadores del propio bloque oficialista (Marcelo Feliú, Pedro Borgini, Federico Fagioli, Sofía Vanelli y Ayelén Durán) avisaron que no iban a dar quórum.
Sin esos votos, la sesión quedó en stand by. UP tiene 21 senadores, necesita 24. Y los bloques dialoguistas dejaron claro que no van a entrar al recinto si el peronismo no pone la cara primero. “Ni sueñen con nosotros si el proyecto incluye a los intendentes”, soltó un joven dirigente kirchnerista del conurbano.
En la práctica, Unión por la Patria parece partida en cinco:
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El kirchnerismo duro, que apoya reelecciones, pero sin incluir a los intendentes.
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El kicillofismo, que quiere sumarlos.
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El massismo, que fue parte de la ley que ahora quieren modificar.
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El graboismo, que no banca ninguno de los dos proyectos.
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Y los intendentes, que presionan desde las sombras para recuperar su posibilidad de reelegir.
Mientras tanto, los bloques opositores ya dijeron que no van a acompañar la reforma. Aunque... hay algunos “libres pensadores” que podrían sumarse si UP junta el quórum solo.
Por ahora, el proyecto tendrá que volver a la comisión de Legislación General. La única vía que les queda al oficialismo para aprobarlo con mayoría simple. Los dos tercios, por ahora, ni en sueños.
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