Las llaves de 60 nuevas viviendas fueron entregadas a familias de Pehuajó, en un acto que tuvo como protagonistas al gobernador Axel Kicillof, la ministra de Hábitat y Desarrollo Urbano, Silvina Batakis, el administrador del Instituto de la Vivienda (IVBA), Diego Menéndez, y el intendente local, Pablo Zurro. Sin embargo, el evento no estuvo exento de tensiones políticas, ya que el discurso de Kicillof y Batakis apuntó directamente a la gestión nacional de Javier Milei.
“Nos da mucha bronca ver que junto a las viviendas que construimos hay un terreno baldío por la decisión de un Gobierno nacional que paralizó todas las obras. Detrás de esas 16 mil casas neutralizadas en la Provincia no hay números ni ladrillos, sino familias bonaerenses y personas de carne y hueso que merecen una vida mejor”, lanzó Kicillof en uno de los momentos más encendidos de la jornada.
Batakis, también filosa, no se quedó atrás. “Las viviendas que se entregaron hoy son la contracara de la motosierra de Nación, que en Pehuajó dejó 147 casas sin terminar, como hizo en muchos lugares de Buenos Aires”, disparó, aludiendo de forma directa a la narrativa libertaria de la "motosierra" que promueve Milei como símbolo de ajuste del gasto público.
Viviendas con sorteo público y apoyo provincial
Las 60 viviendas entregadas en Pehuajó forman parte del Programa Bonaerense II - Solidaridad con Municipios, y están ubicadas en el Barrio Mugica, en las calles Ramos Mejía, Acosta y Obligado, entre Cortázar, Marechal y Puiggrós. Cada una de las casas cuenta con una superficie de 55 m2, distribuidos en 2 habitaciones, cocina-comedor y baño completo.
El proceso de adjudicación fue transparente y público, ya que los beneficiarios fueron seleccionados mediante sorteo con participación de la Escribanía General de Gobierno. Esta modalidad busca garantizar la equidad y evitar cualquier tipo de favoritismo en la asignación de las viviendas.
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